Os volvemos a presentar a Rufo, un perrete que no acaba de adaptarse a la prote.
Cada vez vemos está más apagado, decaído, triste y estresado.
Necesita salir, ir a una casita donde relajarse y poder coger fuerzas, sólo así conseguiría mejorar su estrés y vivir tranquilo y equilibrado.
Con las personas es algo desconfiado, necesita que se respete su espacio, aunque con calma, trabajo y paciencia consigues que pierda esa desconfianza y es un perrete muy bueno y noble.
Con el resto de perritos se lleva bien, aunque es algo dominante.
Prefiere estar a su aire, sin jaleo de jovencitos, que no le molesten mucho.
Debe mejorar su socialización, por lo que buscamos familias con experiencia y con ganas de trabajar con él.
Rufo necesita un hogar urgentemente, que le dé estabilidad, con sus rutinas y el cariño que necesita.