Os presentamos a Esparta, este abuelete grandullón que lleva ya mucho, mucho tiempo en el albergue y se ha vuelto invisible.
Con las personas es muy tímido y algo desconfiado.
Es un abuelo miedoso porque nunca ha interactuado con humanos y, su miedo, poco a poco, ha aumentado.
Una familia que quiera ayudarle, que tenga mucha paciencia, tranquila, con jardín y más perritos sería lo ideal, ya que siempre se ayudan y les genera seguridad.